El período de la gestación hasta la primera infancia es crucial para el desarrollo humano, ya que en esta etapa se forman las bases para el crecimiento físico, emocional y cognitivo. Durante la gestación, el cerebro y los órganos vitales comienzan a desarrollarse, mientras que en los primeros años de vida se consolidan habilidades motoras, sociales y lingüísticas. Las experiencias y estímulos en esta fase influyen significativamente en el bienestar y en la capacidad de aprendizaje futura del niño. Una nutrición adecuada, el cuidado afectivo y un entorno seguro son esenciales para garantizar un desarrollo saludable y equilibrado.